Mozart, Chopin, Beethoven... los compositores de música clásica más célebres de la historia son todos hombres. Sin embargo, centrarnos únicamente en el género masculino supondría pasar por alto a una infinidad de mujeres compositoras que han grabado su nombre a fuego en la historia de la música. A menudo, sorteando grandes obstáculos.

En este artículo, daremos a conocer a algunas de estas mujeres pioneras, ¡si es que aún no las conocías! Se trata de compositoras como Amy Beach, que rompió con los prejuicios de género y clase perpetuados por su madre y su marido y alcanzó la fama a los 44 años. O de Clara Schumann, cuya carrera ya era próspera de por sí antes de casarse con el compositor Robert Schumann.

Estas historias y muchas más merecen ser recordadas. ¿Y qué mejor forma de rendir homenaje a estas compositoras adelantadas a su tiempo que tocar su música en el piano? A continuación, vamos a compartir algunas de nuestras piezas de piano favoritas compuestas por mujeres que puedes aprender con flowkey.

9. Euphemia Allen - Chopsticks Waltz

Un divertido experimento

Si hablamos de compositoras conocidas por un único éxito, Euphemia Allen se lleva el premio. La británica estrenó este clásico, apto para principiantes, allá por el 1877 ocultándose bajo el pseudónimo de Arthur de Lulli. Allen solamente tenía 16 años cuando la compuso y, a día de hoy, se trata de su única obra musical de la que se tiene noticia.

Si hacemos caso a las indicaciones de la compositora, la melodía debería tocarse con las manos en posición vertical, con las palmas mirándose la una a la otra, y siendo los meñiques los únicos que entren en contacto con las teclas. Algo así como si estuviésemos picando cebolla. Aunque en la app de flowkey sugerimos una digitación más convencional, te animamos a intentar tocar de esta forma la versión para principiantes. ¡Verás qué divertido! Por otro lado, esta versión tocada con la digitación que te recomendamos es idónea para aprender a tocar con las dos manos a la vez, ya que solo tienes que tocar una única tecla con cada mano.

La pieza también cuenta con una adaptación para tocar a dúo, por lo que puedes invitar a quien quieras a pasar un buen rato.

8. Helen Rhodes - Because

Le son de l'amour

Nacida en 1858, Helen Rhodes fue una pianista, compositora y profesora francesa que hizo música bajo el pseudónimo de Guy d'Hardelot. La letra de Because es romántica, describiendo la alegría de sentir amor hacia otra persona y, aunque la original sea en francés, aquí tienes un fragmento que hemos traducido al español:

Y cuando tu voz me cautiva divinamente,
veo desvanecerse todo mi dolor,
y todo tu ser canta y vibra en mí,
cuando escucho tu voz.

Esta canción es una gran elección para pianistas de cualquier nivel: su versión para principiantes consta de una sencilla línea melódica con acompañamiento; mientras que la versión avanzada cuenta con exuberantes acordes para ambas manos. Si tu ambición es insaciable, también puedes intentar cantarla al mismo tiempo.

7. Maria Szymanowska - Barcarola

Mécete en esta melodía

Maria Szymanowska fue una compositora polaca y una de las primeras pianistas virtuosas profesionales del siglo XIX. Tras realizar numerosas giras por Europa, se estableció en San Petersburgo, donde compuso para la corte real, ofreció conciertos, dio clases de música y organizó una influyente tertulia cultural antes de fallecer en 1831.

Originaria de las canciones populares entonadas por los gondoleros venecianos, la barcarola es una pieza musical compuesta en el estilo de esos cantos. Suelen tener un compás de 6/8 y esta pieza cumple con esa característica. Cuando toques la Barcarola de Szymanowska, intenta recrear un movimiento de balanceo con tus fraseos, como si estuvieras en una barca.

6. Amy Beach - The Returning Hunter No. 2 - Eskimos Op. 64

Una canción folclórica muy animada

Amy Beach fue una compositora y pianista estadounidense. Aunque se la consideraba un prodigio del piano, su carrera musical se vio limitada por su madre y su marido, que creían que las mujeres de clase alta no debían actuar en público. A pesar de ello, siguió dando un pequeño número de conciertos benéficos, causando también sensación como compositora. Tras las muertes de su madre y su marido, Amy disfrutó de una exitosa carrera como solista, tocando con libertad por todo Estados Unidos y Europa antes de fallecer en 1944.

The Returning Hunter es la segunda de cuatro piezas musicales inspiradas en los pueblos inuit que componen la colección Eskimos. Su rápida melodía y ritmos sencillos hacen de ella una gran elección para pianistas de niveles entre intermedio y avanzado. Cuando toques esta pieza, asegúrate de enfatizar el contraste entre la melodía saltarina y recurrente del principio de cada frase y las líneas centrales más fluidas.

5. Amy Beach - Scottish Legend

Música para la introspección

Esta otra obra de Amy Beach, Scottish Legend, tiene un aire sombrío y es mucho más lenta que The Returning Hunter. A pesar de esto, a tus dedos no les faltará trabajo: la pieza incluye acordes completos en constante movimiento y cantidad de adornos tales como notas de gracia y arpegios. Entre tantos acordes y adornos, asegúrate de dejar brillar la hermosa melodía de la voz superior cuando la toques en el piano.

4. Clara Schumann - Notturno No. 2, Op. 6

El sonido de la noche

Clara Schumann, una de las figuras más importantes de la historia del piano, fue concertista, compositora y pedagoga del Romanticismo. Nacida en 1819 en Leipzig, Alemania, en el seno de una familia musical, Clara empezó a tomar clases de piano con solo cuatro años y fue considerada una niña prodigio. A la edad de 21, ya siendo una pianista de éxito, se casó con el compositor Robert Schumann.

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Con la palabra nocturno (o notturno) nos estamos refiriendo a una pieza musical inspirada en la noche. Este en particular, es la segunda pieza de una colección de seis llamada Soirées Musicales, compuesta por Clara Schumann en su adolescencia. A pesar de su atmósfera adormilada, esta pieza permite a quien la interpreta hacer gala de su virtuosismo. Así que, si te atreves con ella, prepárate para una buena porción de ritmos sincopados y notas de gracia rapidísimas.

3. Clara Schumann - Ballade No. 4 en Ré mineur, Op. 6

Una canción con historia

Esta Balada es la cuarta pieza de la colección Soirées Musicales que hemos mencionado antes cuando hablábamos del Nocturno. Las baladas surgieron como poemas o canciones que cuentan historias, pero también pueden referirse a piezas instrumentales con poderosos elementos narrativos. Dado que esta balada no tiene texto, corresponde a quien la interpreta transmitir su historia a través de su propia ejecución de la pieza. Al igual que el Nocturno, esta pieza está plagada de complejos ritmos y ornamentaciones, lo que la hace más adecuada para pianistas de nivel avanzado.

2. Lili Boulanger - Cortège

Música para celebrar

Nacida en 1893, hija del profesor del Conservatorio de París Ernest Boulanger y de su antigua alumna, la princesa rusa Raïssa Mischetsky, Lili Boulanger pasó toda su vida inmersa en la música. Comenzó su formación musical acompañando a su hermana mayor, Nadia, a sus clases en el conservatorio. Ambas hermanas se convirtieron en conocidas compositoras y pianistas y, la más joven, Lili, fue la primera mujer en ganar el Premio de Roma en composición musical.

El Cortège de Boulanger, cuyo significado es "cortejo", tiene un carácter abiertamente festivo. Esta pieza muestra el estilo de composición impresionista de Boulanger: comienza y termina en re mayor, pero incorpora elementos modales y cromáticos que a veces oscurecen la tonalidad. Si te animas a tocarla, ten cuidado con los cinco sostenidos de su armadura y la variedad de alteraciones en el medio.

1. Cécile Chaminade - 6 Romances sans paroles No. 2, Op. 76

Da rienda suelta a tu expresividad

Cécile Chaminade fue una pianista y compositora francesa, así como la primera mujer en obtener la Legión de Honor: la más alta distinción al mérito en Francia. Tras afianzarse en el mundo de la música clásica, Chaminade solo ofreció conciertos de sus propias composiciones. Antes de su muerte en 1944, tuvo muchos admiradores notables. Entre ellos, la reina británica Victoria.

Este romance cargado de matices se desarrolla en la tonalidad de mi mayor, lo que le confiere un aire inocente y esperanzador. La melodía se toca con ambas manos en paralelo durante la mayor parte de la pieza. Sus fluidas melodías, representativas de la tradición romántica francesa, hacen de esta pieza una gran elección para los intérpretes que buscan explorar la expresiva técnica del rubato.

Sigue aprendiendo con la app de flowkey

Todas las piezas mencionadas en este artículo – y muchas otras compuestas por mujeres – están disponibles para aprender en la app de flowkey. flowkey hace que aprender nuevas canciones sea fácil y divertido, acompañándote en tu aprendizaje del piano con ejercicios prácticos y tutoriales detallados creados por músicos profesionales. Descarga la app de flowkey hoy mismo y empieza a tocar.